En este momento estás viendo Resiliencia, Neuro-plasticidad y Trascendencia

Resiliencia, Neuro-plasticidad y Trascendencia

La Fortaleza Mental que Modela Nuestro Cerebro

Por Pablo A. Morana

Sabemos que, en la actualidad, nos enfrentamos a una serie de desafíos complejos que impactan en la sociedad en múltiples niveles. La rápida aceleración tecnológica, la automatización en el ámbito laboral, la inquietante presencia de la inteligencia artificial, la crisis climática, el aumento de la polarización política y social, pérdida de la
privacidad, son solo algunos ejemplos. Además, no podemos dejar pasar por alto la pandemia de COVID-19, la cual dejó al descubierto la fragilidad de nuestros sistemas de salud, intensificando las desigualdades sociales y económicas preexistentes.

Abordar estos retos requiere de una colaboración global, capacidad de adaptación, la adopción de enfoques innovadores y la promoción de valores fundamentales como la sustentabilidad que nos permitan como sociedad superar estos desafíos, expandir nuestra conciencia y encaminarnos hacia un mundo mejor.

¿Cómo ser resiliente sin morir en el intento?

Comencemos por el principio. La palabra «resiliencia» tiene sus raíces en el latín, deriva del término «resilio», que significa «saltar hacia atrás» o «rebotar». El término fue utilizado originalmente en el ámbito de la física para describir la capacidad de un material para recuperar su forma original después de ser sometido a presión o
deformación. Con el tiempo, el concepto fue extrapolado y hoy se aplica en ámbito psicológico y social, refiriéndose a la capacidad de una persona para enfrentar adversidades, superar situaciones difíciles y recuperarse de experiencias traumáticas.

En estos tiempos que corren necesitamos de algo más, hoy no alcanza simplemente con resistir o soportar la adversidad, como lo hicieron nuestros abuelos y padres, sino también aprender y transformarnos a partir de esas experiencias, para poder ser el arquitecto de nuestra propia realidad como individuo y como sociedad.

¿Y la Neuro-plasticidad cerebral?

Según la neurofisiología, la neuro-plasticidad cerebral es la capacidad dinámica del cerebro para adaptarse y cambiar en respuesta a la experiencia y las demandas del entorno. Este fenómeno refleja el potencial del sistema nervioso central para la capacidad de aprendizaje, la adaptación a nuevas situaciones y la recuperación después de lesiones cerebrales.

Entonces porqué en personas que sufren de estrés postraumático, encontramos muy pocos resilientes, teniendo un sistema nervioso que puede hacer una adaptación estructural, una reorganización funcional, que tiene capacidad de aprendizaje, recuperación y la capacidad de integrar experiencias e Influencias del entorno.

La respuesta es muy simple, porque no alcanza con resistir, recuperarse y adaptarse, necesitamos TRASCENDER. Ahora el circulo está completo diría el maestro Yoda de la película Star War.

Sabemos por la ciencia, que toda experiencia de estrés traumática deja una huella disfuncional en el cerebro “una memoria, una impresión”, eventos como desastres naturales, combates militares, accidentes, abuso físico por parte de otras personas, o simplemente estar sometido a mucha presión durante tiempo prolongado, son ejemplos de eventos que podrían generar lo que conocemos como estrés postraumático.

La Trascendencia implica ir más allá de las limitaciones del yo individual y conectar con algo más grande o profundo que uno mismo, esta experiencia se encuentra en la base de la ley natural, para los físicos cuánticos este es el campo unificado, para los Rishis de la antigüedad representa la conciencia pura.

La práctica de la Meditación Trascendental (MT) puede ser una herramienta valiosa en este proceso, ya que puede ayudar a las personas a entrar en contacto con este campo Trascendental, dando un sentido de calma y claridad interior, que permitirá resetear el sistema nervioso, desarrollando una mayor conexión con su propio ser y el entorno.

Hermann Hesse en su libro Siddhartha (1922), nos cuenta que un día, Siddhartha tiene una experiencia transformadora mientras contempla el río. Se da cuenta de que todo en el universo está interconectado y que la separación entre el yo y la realidad es una ilusión. En ese momento, experimenta un estado de Trascendencia que le permite experimentar la paz interior y la serenidad que había estado buscando. Aunque el éxtasis de esa experiencia eventualmente se fue desvaneciendo gradualmente, dejando solo un eco de ese estado de Trascendencia, Siddhartha supo que nunca más volvería a ser el mismo.

Al integrar la Trascendencia en el proceso de recuperación del estrés postraumático, las personas pueden encontrar una mayor sensación de paz, aceptación y resiliencia.

Esto no significa ignorar o minimizar el dolor del trauma, sino más bien encontrar una manera de integrarlo y transformarlo en una fuente de crecimiento personal y espiritual.

En resumen, si bien la resistencia, la recuperación y la adaptación son aspectos importantes en la superación del estrés postraumático, la Trascendencia puede ofrecer una dimensión adicional que permite a las personas encontrar un sentido renovado de esperanza, significado y bienestar en sus vidas.

Pablo Alejandro Morana.
Profesor Certificado del Programa de Meditación Trascendental
www.mt.org.ar

Deja una respuesta